Palear nieve es un desencadenante conocido de ataques cardíacos. Los departamentos de emergencia en el cinturón de nieve se preparan para casos adicionales cuando ha caído suficiente material blanco para obligar a las personas a salir de sus hogares armadas con palas o quitanieves.
¿Cuál es la conexión? Muchas personas que palean nieve rara vez hacen ejercicio. Recoger una pala y mover cientos de libras de nieve, particularmente después de no hacer nada físico durante varios meses, puede ejercer una gran presión sobre el corazón. Empujar un soplador de nieve pesado puede hacer lo mismo. El clima frío es otro contribuyente porque puede aumentar la presión arterial, interrumpir el flujo de sangre a una parte del corazón y hacer que la sangre sea más propensa a formar coágulos.
Cuando se forma un coágulo de sangre dentro de una arteria coronaria (un vaso que nutre el corazón), puede bloquear completamente el flujo de sangre a una parte del corazón. Privadas de su suministro de oxígeno y nutrientes que sustentan la vida, las células del músculo cardíaco comienzan a cerrarse y luego mueren. Esto es lo que los médicos llaman infarto de miocardio o síndrome coronario agudo. El resto de nosotros lo llamamos un ataque al corazón.
Los llamados signos clásicos de un ataque al corazón son un dolor opresivo en el pecho, dificultad para respirar, dolor que se irradia hacia el hombro izquierdo y baja por el brazo izquierdo, o un sudor frío. Otros signos que son igualmente comunes incluyen dolor en la mandíbula, dolor en la parte inferior de la espalda, fatiga o náuseas inexplicables y ansiedad.
Estos son algunos consejos para palear con seguridad:
- Caliente sus músculos antes de comenzar.
- Palee muchas cargas livianas en lugar de menos pesadas.
- Tome descansos frecuentes.
- Beber abundante agua.
- No sienta que necesita quitar cada mota de nieve de su propiedad.
- Diríjase al interior de inmediato si le comienza a doler el pecho, se siente mareado o le falta el aire, su corazón comienza a acelerarse o algún otro cambio físico lo pone nervioso. Si cree que está teniendo un ataque al corazón, llame al 911 o al número de emergencia local.
Si no está en forma o le preocupa su corazón, contrate a un vecino adolescente. A él o ella le vendría bien el dinero y probablemente el ejercicio.
Imagen: urbazon/Getty Images
Adaptado de una publicación del blog de Harvard Health de Patrick Skerrett.